Fimosis

¿Qué es la fimosis?

La fimosis es una estrechez del anillo de piel que rodea el glande dificultando la retracción del prepucio. Es muy común en los recién nacidos, de hecho, la mayoría de los niños nacen con fimosis y/o adherencias balano-prepuciales. Sin embargo, con el desarrollo natural van desapareciendo y dejando al descubierto el glande.

¿Cuándo la fimosis supone un problema?

El proceso natural de desarrollo en el niño favorece que entre los 3 y 5 años el prepucio y el glande se separen. De hecho, a los 3 años el 90 % de los prepucios se retraen totalmente y menos del 1 % de los varones con 17 años presentan fimosis.  

Sin embargo, si se manifiesta con alguna otra de estas afecciones, es necesario tratar la fimosis de manera más específica y precoz:

  • Dificultad para orinar como disuria o incluso retenciones de orina agudas.
  • Balinitis, infecciones que generalmente se producen a consecuencia de las dificultades para realizar un lavado correcto del pene.
  • Aparición de adherencias en la unión del prepucio con el glande.
  • Parafimosis, que se produce cuando el glande está inflamado y se fuerza su paso por el anillo del prepucio de modo que éste no puede retornar a su posición normal aun cuando no haya erección. Se considera una urgencia.

¿Cómo se trata la fimosis?

Cuando supone un problema, el médico puede prescribir como primera opción una crema corticoidea y si no resuelve o se trata de situaciones especiales o fimosis severa, se recomienda la cirugía: cuando el prepucio no se dilata o se repiten las infecciones, se recomienda la circuncisión. Esta intervención extirpa la piel del prepucio dejando el glande al descubierto. En ocasiones no hace falta quitar todo el prepucio.